Llega el verano con sus temperaturas extremas y el principal problema que afrontan nuestras mascotas es el golpe de calor.

Es una enfermedad en la que el animal puede alcanzar una temperatura corporal por encima de los 40° C y que se manifiesta por:
💥Jadeo constante
💥Mucosas enrojecidas
💥Falta de apetito
💥Quietud o letargia
💥Vómitos
💥Y en situaciones extremas, temblores y hasta convulsiones.

Todos estos síntomas se deben a una falla de su organismo de eliminar el calor (ya que no pueden transpirar como nosotros), entonces, ¿qué podemos hacer para prevenirlo?

1) Brindar sombra: si bien un gato doméstico es muy probable que encuentre el lugar más fresco de la casa y se quede ahí, un gato que está acostumbrado a estar afuera necesitará un lugar con sombra para resguardarse. Ojo que muchas veces los lugares elegidos por ellos pueden ser peligrosos, como abajo de los autos, por eso es muy importante que seamos nosotros los encargados de proveerles de un lugar seguro.
2) Agua fresca y recambio constante: siempre es recomendable tener 1 bebedero más que la cantidad de gatos que tenemos (por ejemplo, si tenemos 2 gatos, tener disponibles 3 bebederos), pero además que estén cargados con agua esté fresca y limpia, así estimulamos su ingesta.
3) Acicalado: la mayoría de los gatos aman el cepillado, es muy importante ya que no solo le sacamos el pelo muerto y apelmazado, sino que de esta forma estamos contribuyendo a mantener su manto que es su principal defensa ante los cambios de temperatura. Un pelo anudado no ayuda a la termorregulación.
4) Descanso: no le exijas a tu felino que se ponga a jugar en días así, ellos necesitan descansar en estos días agobiantes y forzar una actividad física puede ser contraproducente, verás que en cuanto baje la temperatura el té buscará para jugar.
5) Veterinario: Nunca olvides que, antes los síntomas anteriormente descritos, debes recurrir al veterinario, es una urgencia y debe ser tratada como tal.
6) Ofrecer alimento húmedo estos días como pouches o atún o pollo quizá estimula el consumo de alimentos que de otra manera no lo harían y además estamos incorporando más agua de lo habitual.
Si bien los gatos por su naturaleza huyen de estas situaciones, nunca olvides que los gatitos enfermos o adultos mayores son más vulnerables y hay que vigilarlos más en estos días. Cuidarlos y protegerlos harán que tu felino pase un verano fresquito y sin sobresaltos.

Fuente: Veterinaria Agustina Bermudez.