Si tenemos la suerte de pasar por la maravillosa experiencia de acompañar a nuestra mascota en el momento de la gestación, el parto y el posparto tenemos que estar a la altura. Esto implica tomar conocimiento de todo lo que esté a nuestro alcance para hacer de este momento algo inolvidable.

Unas semanas antes del parto debemos preparar el lugar donde nuestra perra tendrá a los cachorros y pasará gran parte del tiempo amamantandolos.

Debe ser una estructura de madera o algún material que la aislé pero sea fácil de limpiar, su diseño se asimila al de un corral o cajón, donde la perra puede recostarse y estirarse sin ningún inconveniente Asegurarse de que los cachorros no puedan salir es importante, por lo que las paredes deben ser lo más altas posibles, sin embargo, deben permitir que la madre salga y entre cuando sea necesario y que no pueda lastimarse sus mamas. El lugar donde vamos a colocarla debe ser un ambiente de la casa tranquilo, donde nuestra mascota se sienta cómoda.

Luego del parto este lugar debe limpiarse de restos de fluido, retirar cualquier resto de placenta que haya quedado y cambiar los papeles de diario por otros limpios o por una sábana o frazada seca y limpia. Mantener una temperatura ambiental cálida sin correntada de aire, en un ambiente tranquilo sin mucho ruido, separado de los otros animales de la casa.

Cuidados a la Mama

Es muy común que después del nacimiento toda la atención esté sobre los cachorros. Sin embargo, no debemos descuidar a la madre, cuanto más tranquila y saludable esté, mejor será la condición de la cría.

Luego del parto debemos higienizarla, molestándola lo menos posible, pero si limpiar con un paño húmedo su cuerpo para evitar infecciones. Dejarla tranquila que ella limpie a la cría a partir de su lamido, además eliminará restos de secreciones de la nariz de los bebés y estimulará su respiración a partir de la fricción.

Al cabo de unas horas del evento, Ofrecerle agua y pequeñas porciones de alimento. Es normal que no se quiera mover de al lado de los cachorros. La hidratación de la perra es muy importante, entre otras cosas para la producción de leche con la que alimentar a la camada.

Se le puede ofrecer alimento casero húmedo alto en proteínas e hidratos de carbono que le resultará más tentador. La dieta de la madre habrá cambiado desde el momento que se enteraron de su preñez a un alimento balanceado de cachorro de buena calidad, Durante el periodo de lactancia la madre comerá 4 o 5 veces al día y recomiendo una alimentación mixta con balanceado de cachorro súper Premium y comida casera húmeda que puede incluir proteínas hidratos de carbono y fibra. Siempre consultar con tu veterinario de cabecera.

Su materia fecal puede alterarse; suele ser más blanda y oscura que lo habitual por un tiempo, esto debido a sus niveles hormonales sumado al cambio de dieta y a las secreciones que consume durante el parto.

Algunas perras se ponen agresivas cuando tienen cachorros y no dejan que nadie los toque, pero la mayoría aceptan la presencia de sus dueños. Respetar sus momentos, quizá no tendrá el mismo carácter de siempre. En estos momentos está en modo leona para proteger a su cría.

Tendrá secreción vaginal durante 15 a 20 días post parto. Esta es de color marrón rojizo y tiene la misma viscosidad de la clara de huevo. Si en algún momento notas que es muy oscura, que tiene coágulos de sangre o pus o que tiene un olor desagradable consulta con tu veterinario inmediatamente. Estos tipos de secreciones pueden indicar una infección.

Las infecciones uterinas ocurren en general dentro de los tres a siete días posteriores al parto y son evitables con medidas de higiene. Son causadas por bacterias que ascienden desde la vulva durante el parto. La perra tendrá fiebre alta, pérdida de apetito, mucha sed y una secreción vaginal con feo olor. Requiere atención veterinaria inmediata.

Las mamás habrán aumentado su tamaño una semana antes del parto. Suavemente hay que comprobar que tengan pezón permeable, masajeandolas suavemente desde la base. Diariamente controlar que no estén muy duras, ni muy calientes, ni dolorosas, lo que podría indicar una mastitis. A veces estas ocurren porque hay pocos cachorros y hay mamás que no son utilizadas por los bebés o porque tienen un conducto del pezón no permeable.

Otra de las patologías frecuentes asociadas al postparto es la eclampsia o hipocalcemia, se debe a un déficit de calcio producto de una insuficiente ingesta en la alimentación durante este periodo y es más frecuente en perras de razas pequeñas y en aquellas madres que tuvieron una camada de cachorros muy grande. Los signos de la hipocalcemia postparto incluyen inquietud, jadeo excesivo, temblores, fiebre alta y hasta pueden presentarse convulsiones. Esta es una emergencia que requiere tratamiento médico inmediato y que puede llevar a la muerte a la mama. Para evitarla es importantísimo el cambio de dieta antes del parto, Y la suplementación con calcio durante toda la lactancia, obviamente indicada por el veterinario de cabecera.

Cuidados de los Cachorros

Inmediatamente luego de su nacimiento los cachorros son separados de su placenta, la mama corta el cordón umbilical con su boca y posteriormente los comienza a lamer enérgicamente a partir de fricción para que respiren y eliminen las secreciones de los orificios nasales. Esto lo suele hacer la mama pero en algunos casos por distintas circunstancias ella no lo hace y debemos estar preparados para ayudarla. Inmediatamente hay que secarlos con toallas limpias y colocarlos en las mamas para que tomen el calostro que es una leche materna especial por su composición en inmunoglobulinas lo que hará que tengan defensas naturales. Además es el contacto físico con la madre lo que hará que mantengan su temperatura corporal.

Dentro de las 24 hs post nacimiento tienen que tener su primera revisación médica por el veterinario de cabecera para que este descarte enfermedades congénitas frecuentes y nos dé aún más consejos para estas semanas de posparto.

Es importante anotar los pesos de los cachorros al nacimiento y controlar estos semanalmente para que toda la camada crezca a la par y si esto no fuera así, ayudar a aquellos que son más débiles ya sea priorizando las mamas inguinales para estos bebés o bien suplementándolos con sustituto lácteo. (Siempre recomendado por su veterinario)
Es una maravillosa experiencia acompañar a tu mascota en este momento, disfrútala porque pasa rápido y no dejes de asesorarte por tu veterinario.

Fuente: Agustina Bermudez, veterinaria.